Desde que se implementó el nuevo código procesal en 2014 y se eliminó el expediente escrito, el Fuero Penal de Neuquén redujo en un 90% el consumo de papel.
De un promedio anual que llegó a superar las 1000 resmas entre hojas Oficio y A4 entre los anteriores juzgados y cámaras, se pasó a 90 según los registros de consumo, de la Oficina Judicial Penal de la I Circunscripción del año pasado. Según las estimaciones, las cifras bajarán aún más al cierre de 2018.
¿Por qué se redujo el consumo? Porque se eliminó el concepto del expediente judicial escrito y la información referida a las causas se resguarda de manera electrónica. El principal instrumento del nuevo sistema penal es la audiencia pública: todas las peticiones y actuaciones relacionadas con una causa se realizan de manera oral y frente a un juez o jueza, que la mayoría de las veces resuelve en el momento o en plazos mínimos. Ya no se acumulan pedidos ni se deben realizar copias de las causas, con miles de fojas y decenas de cuerpos. Desde 2014, toda la información que se produce en las audiencias se registra en videos que, además, en su mayoría son públicos.
Otro aspecto fundamental en la reducción del uso del papel como soporte de información tiene que ver con la aparición de las Oficinas Judiciales como organismos administrativos, que concentraron e hicieron más eficientes las estructuras que hasta 2014 concentraban los juzgados de Instrucción, Correccionales y Cámaras. Actualmente, cinco Oficinas Judiciales -una por cada Circunscripción- gestionan la totalidad del funcionamiento administrativo del fuero penal en toda la provincia.
En 2011, todos los organismos del Fuero Penal con sede en Neuquén capital utilizaron 1299 resmas de papel; en 2012, 985; y en 2013, el último año del viejo sistema, 1020. El año pasado, la Oficina Judicial Penal de la I Circunscripción, que concentra aproximadamente el 70% de la actividad del fuero en la provincia, utilizó sólo 90 resmas, ya sea para proveer a la actividad de los jueces y juezas como al sector administrativo.