Desde el año 2013 el Poder Judicial comenzó un proceso de digitalización de la información e incorporación de tecnología con el fin de optimizar el servicio y mejorar los tiempos de la justicia. Primero se aprobó el Reglamento del Expediente Digital, luego, en una segunda etapa se implementó el Proceso de Informatización del Expediente de Apremios.
En esta oportunidad se implementará la tercera etapa del Expediente Digital de Apremios en los Juzgados de Juicios Ejecutivos de la I Circunscripción Judicial, lo que posibilitará el ingreso de demandas y escritos, no sólo por parte de la Fiscalía de Estado, como se hizo en las etapas anteriores, sino también por parte de las municipalidades y demandados, para luego extender esta solución al resto de las causas del fuero ejecutivo.
Durante esta implementación, se realizará una revisión conjunta con los juzgados, los matriculados del Colegio de Abogados y la Dirección General de Informática, donde se impulsarán las mejoras necesarias para la nueva práctica, y a partir de allí continuar con los Fueros Civil, Laboral y Familia.
Mediante este sistema se podrá ingresar una demanda, presentaciones de escritos o introducir documentación digitalizada. Para hacerlo sólo se deberá ingresar a la Plataforma web con el mismo usuario y contraseña que utiliza para la notificación electrónica, dichas credenciales serán utilizadas para la identificación del profesional, de manera similar a las credenciales utilizadas con la clave fiscal de la AFIP para la presentación de declaraciones juradas .
Luego de ingresar la demanda, el sistema procede al sorteo, asigna número de expediente e instrumenta un mecanismo de validación, el cual consiste en otorgar un recibo (“cargo”), en donde el sistema incluye un código de barras con un valor numérico con el objeto de garantizar que el documento electrónico ingresado por el abogado no ha sido alterado desde su presentación. Este es el mismo mecanismo de seguridad utilizado por la firma digital.
La ventaja principal de esta opción es la reducción en los tiempos de implementación, al eliminar el otorgamiento de certificados para firma digital a los profesionales, reemplazando el uso de ésta por una validación criptográfica, lo cual simplificará la operatoria para los usuarios del sistema.